Hablando con la Profa

Imagen: genial.ly y SoundCloud Como mencionaba en mi anterior y primera entrada, las TIC nos han permitido adaptarnos más rápido y con una mayor flexibilidad a esta ya conocida "nueva normalidad", y además nos han abierto nuevos horizontes.  Y sobre este último aspecto es sobre el que quiero hablaros hoy. Debido a la situación de distanciamiento que estamos viviendo me ha surgido la oportunidad de participar en un proyecto de voluntariado coordinado por la Universidad Antonio de Nebrija con el Centro de Acogida Temporal de Cruz Roja. Es un proyecto en el que los voluntarios damos clases de español a refugiados, y el cual, normalmente se desarrolla en su totalidad de forma presencial, pero esta vez se ha tenido que adaptar al sistema en línea, lo que ha hecho posible mi colaboración desde Hong Kong.  En esta entrada os quiero enseñar una imagen interactiva que he creado como parte de ese proyecto para hacer una presentación asíncrona con los alumnos y en la que he combinado

Imagen: www.pixabay.com Desde el comienzo del coronavirus, home learning es uno de los términos que más he escuchado en el entorno educativo, y que, sin duda, ha tenido un gran impacto en la forma de enseñar. De la noche a la mañana, tuvimos que adaptar todas nuestras clases a un formato online,  y por supuesto, eso solo pudo ser gracias a la tecnología .  Por eso, además de todo lo que ya se ha hablado de lo que la tecnología puede aportar a la enseñanza de lenguas extranjeras, me gustaría contaros aquí tres aspectos que la misma nos ha aportado, tanto a profesores como a alumnos, en nuestras clases de español en estos tiempos de crisis. 1. Rápida adaptación al cambio  Zoom, Skype, Hangouts... son solo varios ejemplos de aplicaciones al alcance de nuestra mano con las que hacemos clases en línea desde el primer día y gracias a las cuales no hemos tenido que interrumpir la actividad docente.  2. Apertura de nuevos horizontes Antes del coronavirus, muchos